➤ Janice Lorraine empezó a entrenar a los 55 y hoy, con 82 años, inspira al mundo con su rutina, su disciplina y su mensaje sobre el poder de elegir cómo envejecer.
Hay historias que no se olvidan. La de Janice Lorraine es una de esas. Con 82 años, esta mujer australiana no solo sigue entrenando todos los días, sino que también acumula más de 25 premios internacionales en fisicoculturismo natural. Y lo mejor: empezó su camino recién a los 55. Porque sí, nunca es tarde para reinventarse.
🏋️ Fuerza, constancia y cero excusas
Janice entrena seis veces por semana. Alterna sesiones de pesas con caminatas al aire libre. Su enfoque no es agresivo, es inteligente. Trabaja con ejercicios de fuerza para mantener la masa muscular, y suma movimientos de flexibilidad para cuidar las articulaciones y el equilibrio.
En su blog escribe: “El entrenamiento de resistencia con pesas revierte el proceso de envejecimiento”. Y parece que tiene razón.
🥗 Su dieta: simple, real, sin ultraprocesados
Nada de modas. Janice basa su alimentación en comidas reales: vegetales frescos, pescado, pollo, carne magra y batatas. Se permite un pequeño placer diario: una copa de vino tinto. Y deja un consejo que es oro: “Mastica más y comerás menos”.
Eso, sumado a su rutina de ejercicio, le permitió no solo verse bien, sino sentirse fuerte, lúcida y feliz con su estilo de vida.
👑 Romper estereotipos, el verdadero músculo
Cuando comenzó, los gimnasios eran territorio de hombres. Muchas veces la miraron con desconfianza. Pero Janice siguió. Compitió por primera vez en Sídney a los 56 y ganó. Desde entonces, recorrió el mundo: Las Vegas, Dubái, Hawái, Praga. En 2022, se convirtió en la primera mujer de más de 80 años en ganar el título de Ms. Mundo en culturismo natural.
Su historia también tiene amor: su pareja David, 23 años menor, la acompaña en cada paso. Aunque no todo fue apoyo: muchas personas la juzgaron. Ella responde con elegancia:
“Quienes juzgan cómo viven los demás se pierden la oportunidad de explorar lo posible”.
✨ Una inspiración viva
“Muchos jóvenes atletas se sacaron fotos conmigo en Praga. Me decían: ‘Eres nuestra inspiración’”, contó Janice. Y no es para menos. Su vida demuestra que el tiempo no es una barrera, sino una excusa que podemos dejar atrás.