En un movimiento que podría sacudir la industria tecnológica, OpenAI ha reservado capacidad de producción en TSMC, el gigante taiwanés de semiconductores, para fabricar sus propios chips especializados en inteligencia artificial utilizando la avanzada tecnología de 1,6 nm. Este salto, que se espera materializar en 2026, marcaría un cambio crucial en la estrategia de OpenAI, permitiéndole ganar independencia en el suministro de hardware y reducir costos frente a gigantes como NVIDIA y Google.
Una jugada estratégica clave
La decisión de OpenAI de fabricar sus propios chips es similar a lo que hizo Apple con sus procesadores, como el chip M1. Esto le permitiría tener un control total sobre su hardware, optimizando su rendimiento para las necesidades específicas de sus modelos de inteligencia artificial, como ChatGPT, además de reducir la dependencia de proveedores externos como NVIDIA, cuyas GPUs son fundamentales para la IA.
Actualmente, OpenAI invierte sumas colosales en servidores de NVIDIA para alimentar sus modelos, y con el crecimiento continuo de herramientas como ChatGPT, esta infraestructura resulta extremadamente costosa. Se estima que cada consulta de ChatGPT le cuesta a la compañía unos 4 centavos de dólar, y si su uso alcanzara la décima parte del volumen de las búsquedas de Google, OpenAI enfrentaría una factura anual de 16.000 millones de dólares en chips. Por eso, esta estrategia de desarrollar su propio hardware es vital para acercarse a la rentabilidad.
Tecnología de vanguardia en 1,6 nm
El proceso de 1,6 nm, también conocido como A16, es una tecnología de última generación en la industria de semiconductores. Aunque aún está en desarrollo, promete ofrecer un salto significativo en rendimiento y eficiencia energética en comparación con los nodos actuales de 3 nm y 4 nm que utiliza TSMC. OpenAI no solo se adelantaría a otros gigantes del sector como Intel y Samsung, quienes planean iniciar la producción con este proceso en 2027, sino que también se asegura un lugar en la primera fila de la innovación en IA.
La posible colaboración con Apple
Los rumores indican que Apple podría ser un aliado en esta iniciativa. Las conexiones entre ambas compañías se han estrechado recientemente con la integración nativa de ChatGPT en los sistemas operativos de Apple y el interés de la compañía de Cupertino en participar en la próxima ronda de financiación de OpenAI. Apple, que también fabrica sus chips personalizados a través de TSMC, podría colaborar con OpenAI, aunque por el momento sus objetivos en inteligencia artificial siguen centrados en la ejecución local en dispositivos, en lugar de competir directamente como proveedor de servicios de IA.
Un desafío a la hegemonía de NVIDIA
La fabricación de su propio chip podría reducir la dependencia de OpenAI de NVIDIA, quien hasta ahora ha dominado el mercado de hardware para IA. Este movimiento también podría presionar a NVIDIA, ya que OpenAI, una de sus mayores compradoras, estaría desarrollando una alternativa interna, lo que podría alterar el equilibrio del mercado y afectar la posición dominante de NVIDIA en la industria.
Apple fue una de las primeras empresas en adoptar la tecnología de 5 nm de TSMC para sus procesadores M1, que marcaron un punto de inflexión en el rendimiento y la eficiencia de sus dispositivos. Ahora, OpenAI parece estar siguiendo un camino similar, pero con la ambición de dominar el futuro de la inteligencia artificial a través de un hardware optimizado para sus necesidades.