El nuevo líder de Hezbollah aseguró que el grupo puede continuar la guerra pero no descartó negociaciones con Israel

En un contexto de guerra continua en el sur de Líbano, el nuevo líder de Hezbollah, Naim Qassem, asumió su rol al frente del grupo chií con un mensaje mixto: aseguró que la organización tiene la capacidad de sostener la lucha contra Israel durante meses, aunque expresó disposición a negociar un cese de hostilidades “con condiciones”. Este anuncio llega después del asesinato de Hassan Nasrallah, ex líder de Hezbollah, en un ataque israelí en Beirut, lo que convirtió a Qassem en el principal referente de la organización armada, conocida por su influencia en la política y seguridad libanesa.

Qassem, quien durante más de tres décadas fue el ‘número dos’ de Nasrallah, abordó por primera vez la posibilidad de un diálogo “indirecto” con Israel en su discurso inicial como secretario general. “Si el enemigo decide acordar un alto el fuego, diremos que sí, pero con condiciones”, aseguró el líder, que en su intervención también apeló a la paciencia de los libaneses y de sus combatientes, quienes enfrentan la ocupación israelí en el sur del país. Para Hezbollah, la retirada israelí es una premisa indispensable, ya que, según Qassem, “quedarse en nuestra tierra solo incrementará sus pérdidas y llevará a su derrota”.

La violencia ha dejado una estela de destrucción: más de 2.700 muertos y cerca de 1,2 millones de desplazados en el Líbano. A esto se suman las pérdidas de líderes de alto rango dentro de Hezbollah, debilitando la estructura operativa del grupo.

Para el secretario general, el líder del Parlamento libanés, Nabih Berri, es una figura clave en las posibles negociaciones, respaldado por su experiencia como mediador y sus lazos con el grupo chií AMAL, aliado de Hezbollah. Sin embargo, Qassem advierte que “todavía no existe un proyecto de paz consensuado”.

¿Un Giro Estratégico por Factores Externos?

Qassem se refirió a las elecciones en Estados Unidos, insinuando que el resultado podría influir en el accionar de Israel. No obstante, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, no tardó en responder, sugiriendo que el liderazgo de Qassem podría ser “temporal”, dejando entrever que el nuevo jefe de Hezbollah también podría convertirse en un blanco prioritario para Israel.

Quién es Naim Qassem

Graduado en Química y formado en teología, Qassem fue uno de los fundadores de Hezbollah en los años 80, en pleno conflicto con Israel. Su vida dentro de la organización refleja una evolución estratégica del grupo, que pasó de ser una milicia antiisraelí a una fuerza política central en Líbano, con respaldo en Irán y Siria. Su nombramiento señala la continuidad de una línea dura, aunque con un potencial aperturista si las condiciones lo permiten.

Con este cambio de liderazgo, Hezbollah podría enfrentar un dilema entre la resistencia armada y la posibilidad de una tregua histórica, aunque “con condiciones”.