En el eterno debate sobre cuántos pasos dar para mantener un estilo de vida saludable, un reciente estudio llevado a cabo por investigadores del Brigham and Women’s Hospital de Boston ha arrojado una nueva luz. Publicado en la revista JAMA Internal Medicine, el estudio revela que tanto contar el tiempo dedicado al ejercicio como contar los pasos tienen beneficios similares para la salud.
Durante cuatro años, los investigadores siguieron de cerca la actividad física de más de 15.000 mujeres sanas mayores de 62 años. Los resultados, publicados esta semana, mostraron que caminar entre 8.000 y 8.500 pasos diarios redujo el riesgo de enfermedad cardíaca en un 40%, comparado con aquellas que daban alrededor de 3.000 pasos al día. Sin embargo, también encontraron que el mismo nivel de reducción del riesgo se aplicaba a quienes realizaban 75 minutos de ejercicio al día, sin tener en cuenta los pasos.
El Dr. Rikuta Hamaya, investigador principal del estudio, destacó la importancia de ofrecer múltiples formas de medir la actividad física, ya que diferentes personas tienen preferencias y estilos de ejercicio distintos.
Estos hallazgos desafían las recomendaciones actuales de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que sugiere dedicar al menos 150 minutos a la semana a ejercicios moderados o 75 minutos a actividades vigorosas. Sin embargo, el estudio respalda la flexibilidad en las pautas de actividad física, permitiendo a los individuos elegir la métrica que mejor se adapte a sus preferencias y hábitos.
En un mundo donde la falta de actividad física es una preocupación global, este estudio ofrece una nueva perspectiva sobre cómo medir y alcanzar objetivos de ejercicio para una vida más saludable.
Curiosidad Relacionada: Los perros, conocidos por su amor por los paseos, pueden ser excelentes compañeros para cumplir con las metas de actividad física, ¡así que no olvides llevar a tu amigo peludo contigo en tus caminatas diarias!