Los científicos utilizan inteligencia artificial para hacer que la cerveza tenga un sabor aún mejor

La prestigiosa industria cervecera belga, reconocida mundialmente por su diversidad y calidad, da un paso adelante en su búsqueda constante de la excelencia en el sabor de sus productos, gracias a la aplicación de la inteligencia artificial (IA).

Un estudio reciente, liderado por el Profesor Kevin Verstrepen de la Universidad KU Leuven, ha puesto de manifiesto el potencial de la IA para perfeccionar aún más las cervezas. Publicado en la reputada revista Nature Communications, este estudio se centró en analizar la composición química de 250 cervezas comerciales belgas de diversos estilos.

Utilizando técnicas de aprendizaje automático, se desarrollaron modelos predictivos para comprender cómo la composición química influye en el sabor y la apreciación por parte del consumidor. Un hallazgo destacado fue la capacidad de la IA para identificar pequeñas variaciones en la concentración de compuestos químicos, que tienen un impacto significativo en el sabor final de la cerveza.

Incluso sustancias tradicionalmente consideradas desfavorables podrían contribuir positivamente al perfil de sabor, cuando se encuentran en concentraciones adecuadas y se combinan con otros compuestos aromáticos. Además, la retroalimentación de un panel de cata complementó las predicciones de los modelos de IA, proporcionando una visión más completa sobre cómo los consumidores perciben el sabor de la cerveza.

Estos avances no solo benefician a las cervezas alcohólicas, sino también a las sin alcohol, donde los ajustes precisos en la composición química podrían mejorar la experiencia sensorial para los consumidores.

A pesar de la contribución de la IA, el estudio destaca la importancia continua de la destreza artesanal de los cerveceros. Si bien la IA puede ofrecer recomendaciones valiosas, sigue siendo responsabilidad del cervecero aplicar estos conocimientos en el proceso de elaboración, preservando así la rica tradición cervecera belga.

En conclusión, la integración de la inteligencia artificial en la industria cervecera representa un emocionante avance hacia la perfección en el sabor de la cerveza, manteniendo al mismo tiempo el respeto por la artesanía y la herencia de esta industria centenaria.