En un mundo lleno de estrés y tensiones, descubrimos que el simple acto de besarse no solo es placentero, sino que también ofrece una serie de ventajas para nuestra salud física y emocional. Un estudio revelador nos sumerge en los beneficios detrás de cada beso apasionado.
Desde la liberación de endorfinas hasta el fortalecimiento del sistema inmunológico, besarse se convierte en una poderosa herramienta para mejorar nuestro bienestar. La especialista en Psicología Clínica, Marina Sangonzalo Candel, del Hospital Quirónsalud Valencia, nos explica que en cada beso movemos hasta 36 músculos y nuestro corazón puede cambiar de un estado de reposo a agitación en un abrir y cerrar de ojos.
Pero los beneficios no se detienen ahí. Estudios científicos sugieren que los besos tienen propiedades analgésicas, al liberar endorfinas que proporcionan alivio ante distintos tipos de dolor. Además, contribuyen a reducir el estrés al liberar oxitocinas, conocidas por fomentar sentimientos de afecto y bienestar, al mismo tiempo que disminuyen los niveles de cortisol, la temida “hormona del estrés”.
Desde el punto de vista sexual, un estudio realizado en Albany, Estados Unidos, en 2018, revela que los besos profundos durante las relaciones aumentan las probabilidades de experimentar un orgasmo. Se destaca la importancia de los besos en este ámbito, especialmente para las mujeres, ya que el 52,8% de los hombres podrían tener relaciones sexuales sin antes besarse, frente al 14,6% de las mujeres.
Pero hay más: los beneficios se extienden a la salud bucal. Según el odontólogo español Fernando Soria, besar estimula las glándulas salivales, incrementando la secreción de saliva, un protector natural de los dientes. Esta acción, crucial para la neutralización de ácidos, remineralización del esmalte y lubricación de las mucosas, es particularmente beneficiosa para aquellos con sequedad bucal.
En conclusión, besarse no solo es un acto de afecto, sino una fuente inagotable de bienestar y salud. ¡Así que, a dar rienda suelta al amor y disfrutar de los múltiples beneficios que los besos nos ofrecen!
Curiosidad aleatoria: ¿Sabías que el beso más largo registrado duró 58 horas, 35 minutos y 58 segundos? Un récord impresionante que demuestra el poder duradero de este gesto romántico.