🌐 Elon Musk, conocido por sus éxitos con Tesla y SpaceX, llevó a Twitter hacia un cambio tan profundo que la red social se convirtió en algo totalmente diferente: X. La reciente publicación del libro Character Limit: How Elon Musk Destroyed Twitter por los periodistas del New York Times Kate Conger y Ryan Mac, nos invita a un recorrido minucioso por este proceso. Musk, con su adquisición impulsiva, no solo cambió el nombre, sino que también transformó el espíritu de la plataforma.
📚 “He hecho una oferta”, comenzaba el tuit de Elon en abril de 2022. Para Conger y Mac, esta frase fue la culminación de un proceso que habían observado durante una década. La adquisición de Twitter por 44.000 millones de dólares fue una decisión impulsiva que, según los periodistas, estuvo marcada desde el comienzo por los errores y la falta de planificación.
💸 Desde el principio, Musk se mostró crítico del modelo publicitario de Twitter, lo cual provocó una fuga masiva de anunciantes. Su visión de un modelo de verificación pago, que tenía como objetivo generar ingresos rápidos, resultó un fracaso. La plataforma sufrió una crisis interna con la salida de empleados clave y se convirtió en un lugar más cínico y hostil.
🛑 Contrariamente a su retórica de “libertad de expresión”, Musk no tuvo un plan claro para la red social. La intención de convertir a Twitter en una plaza pública más abierta terminó degenerando en un caos. “No es casualidad que los usuarios más leales de Twitter se refirieran a la plataforma como un ‘infierno’”, señalan los autores. El ambiente, según ellos, se volvió un lugar tóxico del que era difícil desconectarse.
👥 Sin embargo, los problemas de Twitter iban más allá de la tecnología. Musk creyó que podía resolverlo todo con un enfoque de ingeniería, pero se enfrentó a desafíos sociales y políticos que requerían otro tipo de liderazgo. En lugar de ello, lanzó una oferta por la empresa que contenía una broma sobre marihuana, subestimando la complejidad del ecosistema de Twitter.
🗣️ Los despidos masivos empeoraron la situación. Musk quería un entorno de “trabajo duro”, pero al hacerlo perdió el talento que necesitaba para sostener la empresa. Aun así, se mantuvo activo en la plataforma, convencido de estar “salvando al mundo”.
🔎 Curiosidad: ¿Sabías que la oferta de Elon Musk por Twitter, a 54,20 dólares por acción, fue en parte un guiño al número “420”, que es una referencia al consumo de marihuana? Este tipo de bromas y guiños son comunes en la comunicación de Musk, quien parece disfrutar de agregar toques provocadores incluso en situaciones de alta seriedad empresarial.