El emblemático Club Atlético Boca Juniors, uno de los titanes del fútbol argentino, conmemora hoy sus 119 años de trayectoria inigualable. Fundado por cinco audaces amigos inmigrantes de Italia un 3 de abril de 1905, el Xeneize es mucho más que un equipo; es una institución que ha dejado una huella imborrable en la historia del deporte nacional.
La odisea comenzó en la Plaza Solís, donde Esteban Baglietto, Alfredo Scarpatti, Santiago Sana y los hermanos Teodoro y Juan Antonio Farenga dieron vida al sueño de fundar un club. Aunque el primer intento se vio interrumpido, no se rindieron y lograron su cometido en un banco de la plaza. Así nació Boca Juniors, con un nombre que reflejaba la esencia del barrio y un toque de prestigio inglés con el añadido de “Juniors”.
Desde entonces, el club ha cosechado éxitos inigualables, con 74 títulos en su haber, incluidos seis trofeos de Copa Libertadores y tres Intercontinentales. Su estadio, La Bombonera, es un ícono mundialmente reconocido, y su fervorosa hinchada ha conquistado corazones en todos los rincones del planeta.
Pero detrás de los logros deportivos también hay historias curiosas, como la elección de los colores del equipo. Durante años, Boca careció de una identidad cromática definida, hasta que un trabajador del puente del Riachuelo sugirió los colores de la bandera de un buque sueco. Así nació la icónica camiseta azul y amarilla que hoy identifica al club.
En este aniversario, los hinchas xeneizes celebran con orgullo la rica historia de su amado equipo, recordando con cariño a aquellos cinco amigos que, hace más de un siglo, sembraron la semilla de un legado imborrable.
Curiosidad: ¿Sabías que la primera sede social de Boca Juniors fue en un modesto departamento alquilado en la calle Iriarte al 39, en La Boca? Allí se realizaron las primeras reuniones y se comenzaron a trazar los primeros pasos de lo que hoy es una institución emblemática del fútbol mundial.