Aumenta la ludopatía en jóvenes: Cómo detectarla y proteger a nuestros hijos

En la era digital, la ludopatía se ha convertido en un trastorno que afecta cada vez a más jóvenes, impulsados por la facilidad de acceso a las apuestas online a través de dispositivos móviles. Este problema, que antes se observaba mayormente en adultos mayores, ahora está desplazándose hacia adolescentes y adultos jóvenes.

Un informe del Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos de la Defensoría del Pueblo bonaerense revela que el 12,5% de los jóvenes argentinos entre 15 y 24 años ha apostado online alguna vez, cifra que aumenta al 15,5% en el grupo de 25 a 34 años. Esta tendencia alarmante ha llevado a la Ciudad de Buenos Aires a no otorgar nuevas licencias para apuestas online y a regular la publicidad de estas plataformas.

El doctor Federico Pavlovsky, psiquiatra y director de Dispositivo Pavlovsky, explica: “La ludopatía es una enfermedad reconocida por la Organización Mundial de la Salud. La persona con ludopatía tiene un impulso irrefrenable de jugar, consciente de las consecuencias negativas”. Pavlovsky añade que la transformación tecnológica ha potenciado este problema, dirigido especialmente a los jóvenes.

Cinthia, profesora en escuelas de Buenos Aires, comenta sobre el impacto en el ámbito educativo: “Vemos un aumento de estudiantes que participan en juegos de apuestas virtuales, incluso durante las clases. Pierden la noción de estar en un entorno escolar y se aíslan, dejando de socializar”.

Los expertos señalan varios indicadores de ludopatía en niños y adolescentes:

  1. Apostar cuando se siente ansioso o deprimido.
  2. Irritación si no juega.
  3. Pedir dinero a familiares o amigos en secreto.
  4. Vender pertenencias.
  5. Robar a compañeros o padres.
  6. Arriesgar aspectos importantes de su vida.
  7. Buscar revancha tras perder dinero.
  8. Mentir sobre su frecuencia de juego.
  9. Intentar dejar el juego sin éxito.

Las consecuencias incluyen problemas emocionales, deterioro de las relaciones familiares, síntomas físicos como cefaleas y pérdida de peso, disminución del rendimiento académico, y problemas legales.

Los padres juegan un rol crucial en la detección y prevención de la ludopatía. Es fundamental definir horarios para el uso de dispositivos electrónicos, supervisar el contenido al que acceden los niños y fomentar actividades que ofrezcan satisfacción fuera del entorno virtual.

Pavlovsky subraya la importancia de la intervención temprana: “Los padres deben estar atentos a los signos de ludopatía y actuar antes de que las deudas y otros problemas se vuelvan extremos. La accesibilidad a las apuestas y a la pornografía es alta, y aunque no todos se volverán adictos, es un riesgo que debemos considerar”.

La detección temprana y la prevención son claves para proteger la salud mental de nuestros jóvenes en esta era digital.