Durante una entrevista en La mañana con Moria (Eltrece), Eugenia “la China” Suárez respondió sin rodeos a una pregunta que generó polémica: si sus hijos llamaban “papá” a Mauro Icardi. La actriz descartó de inmediato esa posibilidad y aseguró que los niños se refieren al futbolista únicamente por su nombre. “¡No! ¿Cómo papá? ¡Mauro!”, exclamó, dejando claro que los roles familiares están delimitados y respetados dentro de su hogar.
Suárez, madre de Rufina, Magnolia y Amancio, explicó que cada uno de sus hijos mantiene una relación cercana con sus padres biológicos, Nicolás Cabré y Benjamín Vicuña. “Yo nunca permitiría una cosa así”, afirmó, subrayando que los vínculos parentales no están confundidos y que los chicos “tienen super en claro los roles de cada uno”.
La actriz también relató cómo sus hijos tomaron conciencia de la popularidad de Icardi en Turquía, donde el delantero es una figura central del Galatasaray. Recordó que, durante su primera visita a la cancha, los niños se sorprendieron al ver la atención que recibía el futbolista. “Fue fuerte porque no entendían que él era una estrella y vivía con nosotros”, contó.
En otro tramo de la charla, Suárez recordó el primer encuentro que tuvo con Icardi en París, en 2021. Describió aquella noche como un episodio “romántico” y lleno de nervios, señalando que la presencia del jugador la impactó desde el primer momento. “Se me aflojaron las piernas. Me robó un beso”, relató entre risas. Aclaró, sin embargo, que no hubo intimidad y que, tras ese encuentro, la repercusión mediática generó un distanciamiento de tres años.
Por su parte, Icardi también participó de la conversación y destacó el rol fundamental que Suárez tuvo en un momento duro de su vida. Contó que, durante una lesión en la rodilla que lo dejó fuera de las canchas, la actriz se convirtió en su sostén emocional. “Estaba solo con mil problemas, sin poder estar con mis hijas y ella fue el apoyo que necesitaba”, afirmó.
Suárez recordó además el impacto emocional del escándalo mediático que siguió a aquella noche en París, especialmente tras las acusaciones públicas de Wanda Nara. “Fue tremendo, yo soy muy novelera y me lloré todo”, confesó sobre ese periodo.
A pesar de la exposición pública y las tensiones que marcaron el inicio del vínculo, la actriz sostuvo que su relación con Icardi continúa firme. Ambos proyectan un futuro juntos y mantienen una dinámica familiar que, según Suárez, está claramente organizada y respetada.