Luces apagadas, cerebro encendido: ¿por qué no podés dormir si no resolvés todo antes?

El insomnio por “sobrepensar” afecta cada vez a más personas. ¿Qué sucede en la mente cuando el cuerpo quiere dormir, pero los pensamientos no paran?


Cuando llega la noche y el entorno se silencia, muchas personas experimentan una intensificación de pensamientos intrusivos y preocupaciones. Esta hiperactividad mental, conocida como “rumiación nocturna”, es una de las principales causas de insomnio. 

El uso de dispositivos electrónicos antes de dormir puede agravar el problema. Un estudio noruego con más de 45,000 estudiantes reveló que solo una hora adicional frente a la pantalla en la cama aumenta en un 59% el riesgo de insomnio. Este fenómeno, conocido como “desplazamiento temporal”, reduce directamente las horas de sueño. 

La ansiedad y la falta de sueño están estrechamente relacionadas. La pérdida de sueño puede ser un precursor de los trastornos de ansiedad, y la ansiedad conduce a la pérdida de sueño, creando un ciclo difícil de romper. 

Para combatir la rumiación nocturna, los expertos recomiendan:

  • Respiración profunda controlada: Inhalar por la nariz durante 4 segundos, mantener el aire durante 7 segundos y exhalar lentamente durante 8 segundos. 
  • Escritura expresiva: Volcar los pensamientos en papel puede ayudar a procesar sentimientos y reducir la ansiedad. 
  • Evitar pantallas antes de dormir: Reducir el uso de dispositivos electrónicos al menos 30 minutos antes de acostarse. 

El insomnio por sobrepensar es un problema común en la sociedad actual. Implementar rutinas relajantes y técnicas de manejo del estrés puede ayudar a calmar la mente y mejorar la calidad del sueño.