😮 En un giro poco convencional, la reconocida cadena minorista Pang Dong Lai, en China, anunció que a partir de 2024 sus empleados tendrán derecho a 10 días de “permiso por infelicidad” completamente pagos: 5 días para uso personal y otros 5 para acompañar a alguien que no esté pasando un buen momento.
📆 Esta política se suma a los días de descanso tradicionales y busca poner en el centro la salud emocional de los trabajadores, según explicaron desde la empresa. El anuncio rápidamente captó la atención internacional por su enfoque humano y disruptivo.
📌 Pero no es la única: en febrero de 2025, otra compañía de la ciudad de Xiamen ofreció 2 días de “no feliz” y además un préstamo sin intereses para su personal, como parte de un paquete de beneficios que prioriza el bienestar psicológico.
💬 Las reacciones no se hicieron esperar. Muchos usuarios celebraron estas medidas como un alivio real frente al estrés crónico en ambientes laborales cada vez más exigentes. Sin embargo, expertos en relaciones laborales advierten que este tipo de iniciativas no pueden reemplazar reformas más profundas como la reducción de la jornada, el control del burnout o el fomento de ambientes laborales saludables.
🗨️ “Es un primer paso interesante, pero no debe convertirse en una excusa para tapar otros problemas estructurales del trabajo moderno”, opinó una especialista en salud ocupacional de la Universidad de Pekín.
🌐 Mientras tanto, el debate ya se instaló en otros países, donde muchos trabajadores se preguntan: ¿por qué no podemos tener algo así también?
📌 Curiosidad poco conocida: En Japón, algunas empresas permiten a sus empleados tomarse el día libre tras una ruptura amorosa. Incluso tienen nombres específicos para estos permisos: “heartbreak leave”, y el número de días varía según la edad del empleado (¡los mayores de 30 pueden tomarse más días!). 💔