Tres heladerías Argentinas entre las 100 mejores del mundo

Taste Atlas, la prestigiosa guía gastronómica que ofrece información sobre la cocina local de diferentes países, ha destacado a tres heladerías argentinas entre las 100 mejores del mundo. Estos negocios locales han logrado posicionarse en este ranking global gracias a su excelencia en sabor y calidad artesanal.

La primera heladería argentina reconocida es Cadore, un emblemático local ubicado en la Avenida Corrientes, en la ciudad de Buenos Aires. Fundada en 1957 por Silvestre Oliviotti, un inmigrante originario de Cadore, Italia, el negocio se ha convertido en un clásico porteño, conocido especialmente por tener el mejor dulce de leche del país. La guía destaca la combinación perfecta de la técnica italiana y el sabor argentino en el helado de caramelo con chispas de chocolate que ofrece Cadore.

Por su parte, Rapanuifundada en Bariloche en 1996 por Diego Fenoglio, ha logrado destacar en el listado mundial gracias a su extraordinario helado de chocolate en numerosas combinaciones, que refleja los sabores de la región patagónica. Además de heladería, Rapanui es también una reconocida chocolatería, confitería y cafetería, brindando una experiencia sensorial completa para sus visitantes.

La tercera heladería argentina reconocida por Taste Atlas es Heladería Scannapieco, una de las más antiguas de la Ciudad de Buenos Aires. Fundada en 1938 por la familia italiana Scannapieco, se ha destacado a lo largo de los años por su icónico helado de dulce de leche, un delicioso y cremoso helado de caramelo con chispas de chocolate. A lo largo de las generaciones, la familia Scannapieco ha llevado adelante este negocio histórico que se ha convertido en una marca emblemática de la escena gastronómica local.

Estas tres heladerías argentinas han logrado posicionarse entre las mejores del mundo, destacando no solo por la calidad de sus productos, sino también por preservar tradiciones y sabores que los han convertido en referentes de la industria heladera en Argentina y más allá de sus fronteras. Sus reconocimientos en la lista global de Taste Atlas son un orgullo para la industria gastronómica argentina y una invitación para los amantes del buen helado a disfrutar de estas auténticas delicias.