Autoridades en el Reino Unido están considerando implementar restricciones en el uso de redes sociales por parte de niños, según informa The Times. Esta medida surge en medio de crecientes preocupaciones sobre la salud mental de los jóvenes, aunque aún no hay un consenso claro sobre la acción a tomar.
Una de las propuestas contempla la prohibición del uso de todas las redes sociales para menores de 16 años. Sin embargo, también se está considerando la posibilidad de fortalecer los sistemas de control parental para empoderar a los padres en la supervisión de las actividades en línea de sus hijos.
Rachel de Souza, comisaria para la Infancia de Inglaterra, sostiene que las empresas deberían aplicar límites de edad más estrictos, ya que muchos niños menores de 13 años pueden acceder fácilmente a plataformas destinadas a mayores. Esto podría exponer a los menores a contenido dañino, incluida violencia extrema.
Una portavoz del primer ministro británico, Rishi Sunak, afirmó que están “estudiando ampliamente la cuestión de la seguridad de los niños en Internet”. Además, planean recopilar más datos el próximo año para comprender mejor la relación entre los problemas de salud mental y el uso de redes sociales, llenando así un vacío en el conocimiento actual.