La serie “Cromañón”, que relata la trágica noche en la que murieron 194 personas en el boliche de Once, sorprende al público al no incluir ni una sola canción de Callejeros, la banda que estaba tocando en ese momento. La banda sonora de la producción, a cargo de Gabriel Pedernera, opta por composiciones originales y temas de otros artistas para acompañar las emociones de los personajes y reforzar la narrativa, lo que generó reacciones diversas entre los seguidores de Callejeros.
El enfoque de la música en “Cromañón” busca capturar la crudeza y el dolor de los protagonistas, manteniendo una distancia de las canciones de Callejeros. Esto permite abordar la historia desde una perspectiva que prioriza el duelo, el recuerdo y la reconstrucción emocional, sin evocar directamente la música que, para muchos, está inevitablemente vinculada a la tragedia. La serie incluye diez temas originales que crean una atmósfera de melancolía y reflexión, destacando la canción Lo que Perdí, de Santiago Motorizado, la cual conecta profundamente con el duelo de aquellos que perdieron a sus seres queridos esa noche.
Sin embargo, la ausencia de la música de Callejeros no ha pasado desapercibida, y varios fanáticos de la banda han expresado su descontento en redes sociales. Una de las teorías es que la decisión apunta a una representación más neutral de los hechos, mientras que otros creen que omitir la música de la banda desvincula la serie de la esencia de aquella noche. En una entrevista reciente, un guionista de “Cromañón” aclaró que la banda no quiso participar del proyecto y, por lo tanto, no cedió los derechos de sus canciones, lo cual determinó esta ausencia.
A pesar de la polémica, la producción ha logrado que la música compuesta para la serie se convierta en una extensión de las vivencias de los personajes. Cada tema acompaña el viaje emocional de los sobrevivientes, conectando los momentos de silencio y las escenas clave con una sensibilidad que permite explorar la historia desde una perspectiva que prioriza el duelo colectivo y la empatía, sin reabrir viejas heridas.