📍 Estambul – En una escena más digna de una convención de cómics que de una manifestación política, personajes como Batman, Spider-Man, Pikachu y el Joker marcharon este jueves junto a miles de estudiantes por las calles de Turquía. No se trató de una fiesta ni de un evento cultural, sino de una masiva protesta antigubernamental tras la detención del alcalde de Estambul, Ekrem Imamoglu, uno de los principales rivales del presidente Recep Tayyip Erdogan.
🚨 Hasta el momento, 1.879 personas fueron detenidas por la policía turca desde que comenzaron las manifestaciones el miércoles pasado. La represión incluyó el uso de gases lacrimógenos, agua a presión y balas de goma, especialmente en las protestas del campus de la Universidad Técnica de Oriente Medio (METU) en Ankara, donde al menos 30 estudiantes fueron arrestados.
🎭 ¿Por qué los disfraces?
👨🎓 Los estudiantes, protagonistas de estas movilizaciones, decidieron disfrazarse como íconos de la cultura pop para llamar la atención del mundo y visibilizar la situación política del país. “Nuestra lucha es justa”, afirmaron en un comunicado, y convocaron a toda la ciudadanía a sumarse en las plazas y exigir el fin de la represión.
🗣️ El ministro del Interior, Ali Yerlikaya, acusó a los manifestantes de “atentar contra la unidad nacional y los valores familiares”. Sin embargo, el movimiento se ha vuelto imposible de ignorar, con imágenes virales de superhéroes coreando consignas por la democracia y la libertad de expresión.
📰 Por su parte, un tribunal de Estambul ordenó la liberación de siete periodistas detenidos, entre ellos un ganador del prestigioso World Press Photo, tras duras críticas locales e internacionales.
📣 El Partido Republicano del Pueblo (CHP), principal fuerza opositora, llamó a una movilización masiva este sábado en Estambul para exigir la liberación de Imamoglu y mostrar apoyo a los jóvenes reprimidos.
🔍 ¿Sabías qué…?
🎥 El uso de disfraces en protestas no es nuevo: en Hong Kong, durante las manifestaciones de 2019, el uso de máscaras de V de Vendetta y otros personajes se volvió tan común que el gobierno llegó a prohibirlas por ley. En Turquía, la estrategia resurge como símbolo de rebeldía creativa frente a la censura.