Nueva York experimenta una réplica de 3,8 después de un temblor inusual

La ciudad de Nueva York se vio sacudida por un segundo temblor en un mismo día, esta vez registrando una réplica de magnitud 3,8 luego de un sismo más temprano de 4,8 que sorprendió a los residentes de la costa este. Afortunadamente, ambos eventos no dejaron heridos ni grandes daños materiales.

El Servicio Geológico de Estados Unidos inicialmente había medido el segundo temblor en 4,0, pero luego lo corrigió a 3,8. La réplica afectó también al suroeste de Gladstone, Nueva Jersey, con una profundidad de 9,7 kilómetros, haciendo temblar algunas casas en la zona.

A pesar de la magnitud del evento, no se reportaron daños significativos, según confirmaron funcionarios de la ciudad y del estado. La gobernadora Kathy Hochul señaló que no había “informes de daños importantes en este momento” y que las revisiones sobre la infraestructura crítica seguían en curso.

El temblor ocurrió exactamente a las 17:59 horas ET y fue la última de varias réplicas que se sintieron durante el día. Aunque estas réplicas fueron de magnitudes mucho menores, al menos diez temblores adicionales, entre 1,8 y 2,2 de magnitud, se registraron a lo largo del día.

Los expertos restaron importancia a estos movimientos sísmicos, afirmando que son parte de los procesos naturales de la Tierra. El doctor Stephen Holler, profesor asociado de Física de la Universidad de Fordham, explicó que la región ha experimentado tensiones geológicas durante siglos y que estos temblores son el resultado del asentamiento de esas tensiones.

Aunque inusuales, los temblores sirven como recordatorio de la naturaleza dinámica de la tierra y de la importancia de estar preparados para eventos sísmicos en cualquier momento. Por suerte, en este caso, Nueva York y sus alrededores han salido relativamente ilesos de estos acontecimientos.