🌗 La psicología moderna acaba de ponerle nombre y apellido a una sensación que millones de personas arrastraban hace años pero no sabían cómo describir: el “otrovertido”.
🧠 Durante décadas nos hicieron creer que debíamos elegir un bando y quedarnos allí para siempre; o eras el alma de la fiesta o preferías el silencio absoluto. 👉 Sin embargo, la ciencia hoy propone otra mirada y confirma que muchas personas funcionan mucho mejor en el equilibrio.
📊 No sos el único: una tendencia mayoritaria
🔍 Los estudios recientes son contundentes e indican que más del 38% de las personas no encajan en las categorías clásicas de introversión o extroversión pura.
🌊 Los “otrovertidos” no viven anclados en un extremo. Se mueven entre ambos mundos con fluidez, dependiendo del contexto, la energía que tengan disponible ese día o el tipo de interacción social que se les presente.
📝 ¿Cómo saber si sos un otrovertido?
Si sentís que las etiquetas te quedan chicas, revisá si cumplís con estas características clave que definen a este perfil:
- 🔋 Batería flexible: Te recargás en soledad, como un introvertido, pero también disfrutás genuinamente de los espacios sociales adecuados.
- radar Radar emocional: Detectás con facilidad el clima emocional de una situación apenas entrás a un lugar.
- 🦎 Camaleónicos: Son perfiles adaptables, muy observadores y con una gran consciencia de sí mismos.
- 💬 El arte de la charla: Construyen vínculos profundos justamente porque saben cuándo es momento de hablar… y cuándo es mejor hacer silencio.
🚀 La ventaja oculta de no tener etiqueta
🧠 Lejos de ser una indecisión o falta de carácter, esta flexibilidad es una tremenda ventaja cognitiva y emocional.
💪 Las investigaciones muestran que quienes logran alternar entre ambos estilos —es decir, los otrovertidos— tienden a tener una mayor inteligencia emocional y una regulación del estrés mucho más eficiente que los extremos.
💡 El Dato Curioso: La ventaja en las ventas
Ya que hablamos de este tipo de personalidad (que en la academia a veces llaman también “ambivertidos”), hay un dato fascinante del mundo de los negocios que pocos conocen.
En 2013, el psicólogo organizacional Adam Grant hizo un estudio masivo sobre vendedores. El mito popular dice que los extrovertidos son los mejores vendedores, ¿no? Falso. El estudio reveló que los extrovertidos puros vendían un 24% más que los introvertidos, pero los que estaban en el medio (los “otrovertidos” o ambivertidos) vendían un 32% más que los extrovertidos.
¿La razón? Tienen lo mejor de los dos mundos: saben escuchar lo suficiente para entender al cliente (rasgo introvertido) y tienen la energía suficiente para cerrar el trato (rasgo extrovertido). Así que, si estás en este grupo, ¡tenés una mina de oro en tu personalidad! 💼