Una canción puede ser mucho más que un sonido agradable. Puede ser un ancla, una máquina del tiempo emocional, una puerta que abre el pasado. Así lo confirma un nuevo estudio de la Universidad de Waterloo (Canadá), que analizó qué aspecto de la música tiene mayor impacto en la memoria: ¿la melodía, la letra o ambos?
Según los investigadores, las canciones completas son significativamente más eficaces para reactivar recuerdos personales que las letras leídas en voz alta. El hallazgo sugiere que no es solo el contenido emocional el que activa el recuerdo, sino la integración entre ritmo, armonía y palabra.
🧠 Música como marca de tiempo emocional
El estudio, publicado en Memory & Cognition, evaluó a 84 participantes que escucharon fragmentos de canciones populares lanzadas entre 2017 y 2020. A cada uno se le pidió que relatara el primer recuerdo que les surgiera al oírlas, y luego al escuchar solo las letras, pero sin música.
🧾 Los investigadores evaluaron:
- El tiempo que tardaban en recordar
- La intensidad emocional de las evocaciones
- La claridad y riqueza del recuerdo
El resultado fue claro:
“Las canciones completas fueron más efectivas para activar recuerdos personales. A menudo, evocaban momentos asociados con la época en que eran populares”, explicó la Dra. Myra Fernandes, coautora del estudio.
Además, las canciones con tono alegre o positivo tendieron a despertar recuerdos emocionalmente gratos.
👵 Una herramienta clave para la memoria en adultos mayores
El hallazgo tiene un impacto particular en personas con dificultades para recordar, como quienes viven con demencia o deterioro cognitivo leve.
La música no solo evoca recuerdos más vívidos, sino que también genera una sensación de “revivir” el momento, algo esencial para quienes han perdido la capacidad de evocación espontánea.
Este estudio forma parte de un proyecto más amplio que explora el uso de listas de reproducción personalizadas como herramientas terapéuticas para estimular la memoria en adultos mayores.
“La música actúa como una marca temporal, guiando al cerebro a momentos específicos del pasado”, remarcaron los autores.
🔬 ¿Qué pasa en el cerebro cuando escuchamos música?
La conexión entre música y memoria no es solo poética. Es profundamente neurológica.
El neurólogo Santiago Tizio, jefe del área de neurología del Hospital Español de La Plata, lo explicó así:
“El cerebro no procesa los sonidos como un receptor pasivo. Las redes neuronales se reorganizan en tiempo real cuando perciben estímulos rítmicos o sonoros”.
Esto significa que escuchar música literalmente cambia la forma en que el cerebro se conecta consigo mismo. Esa plasticidad cerebral es clave para entender por qué ciertos ritmos o melodías nos afectan emocionalmente, nos activan o nos calman.
🧠 Estudios de las universidades de Oxford y Aarhus confirmaron que los sonidos repetitivos modifican los patrones de conexión neuronal, influyendo en funciones como el ánimo, la concentración y la coordinación motora.
🎵 Musicoterapia: una ciencia del ritmo y la emoción
La musicoterapia neurológica utiliza estas cualidades para tratar diversas condiciones.
“La música es un arte temporal. Su ritmo repetitivo y predecible organiza estímulos en el tiempo. Eso estructura la actividad cerebral”, explicó la musicoterapeuta María Fernanda Rodríguez.
Estas técnicas se aplican en personas con:
- Parkinson
- Daño cerebral adquirido
- Trastornos del desarrollo
- Demencias
En todos los casos, el objetivo es aprovechar la fuerza organizadora de la música para estimular funciones cognitivas, emocionales y motoras.
🎧 ¿Y si una playlist puede devolvernos quiénes fuimos?
El estudio de Waterloo sugiere algo tan profundo como esperanzador: recordamos mejor lo que sentimos, no solo lo que pensamos.
Y la música —con su mezcla de emoción, ritmo, época y estética— puede ser el puente más poderoso hacia esos recuerdos que creíamos perdidos.
Así que la próxima vez que suene “esa” canción, no subestimes lo que puede activar. Tal vez no solo te haga bailar: puede devolverte un pedazo de tu historia. 🕰️🎶