Las mejores series de dibujos animados de los 80 y los 90

Los años 80 y 90 permitieron a los niños de entonces descubrir gracias a la la televisión un nuevo mundo de diversión, con innumerables personajes que transmitían valores y conocimiento.

Desde la mirada al espacio y al futuro a los entresijos del funcionamiento del cuerpo humano, niños, animales y criaturas fantásticas poblaron las tardes televisivas de los 80 y 90

La nostalgia (y las necesidades de programación) han ampliado el alcance de estos personajes hasta popularizarlos también entre generaciones posteriores. Con la proliferación de canales de televisión a finales del pasado siglo y comienzos de este han surgido muchísimos nuevos personajes y series.

Por fortuna las innumerables plataformas de streaming permiten recuperar a muchos de los más memorables dibujos animados (de animación «tradicional», nada de animación digital) para deleite de los más pequeños de la casa y, por qué no, disfrute nostálgico de los que los descubrieron en su infancia con las emisiones televisivas originales.

Las mejores series de animación y dónde verlas en Internet

«Érase una vez el cuerpo humano» (Tubi): Los secretos del funcionamiento de cuerpo humano nunca fueron más didácticos y divertidos que con esta serie en la que órganos, células, tejidos, gérmenes, alimentos desvelan sus secretos.

«Érase una vez el hombre» (Tubi, Freevee): La historia de la Humanidad a lo largo de las distintas épocas y países. Cultura, sociedad, inventos, y de fondo cómo hombres y mujeres han avanzado juntos a lo largo de los siglos.

«Garfield» (Peacock, PlutoTV): El gato atigrado favorito de todos y creado por Jim Davis es tan divertido y gamberro a ratos como cáustico y cascarrabias otros. Para disgusto de Jon, su compañero humano, este felino amante de la lasaña y las siestas tiene su propia personalidad y sus propios planes, entre los que destaca arruinarle las cenas con Liz, la veterinaria de la que está enamorado. Nadie odia los lunes como Garfield.

«La pantera rosa» (Prime): Con la omnipresente música del gran Henry Mancini como telón de fondo y con un humor a ratos absurdo, a ratos surrealista, la improbable pantera de color rosa vive aventuras que van de lo cotidiano a lo extraordinario pero siempre con un humor irresistible.

«Las tortugas ninja» (Paramount+): Educadas por su maestro Splinter en las alcantarillas de Nueva York y bautizadas con los nombres de cuatro de los más grandes artistas del Renacimiento, Leonardo, Raphaello, Michelangelo y Donatello, combaten el crimen gracias a sus conocimientos de artes marciales, su arrojo y su fraternal camaradería.

«Los Diminutos» (Pluto TV): Tan sólo un niño de 13 años conoce la existencia de la familia delos Diminutos, unos personajes que por su reducido tamaño hacen honor a su apellido y con quienes vivirá emocionantes aventuras mientras trata de proteger su existencia del malvado profesor que los busca con aviesas intenciones.

«Los osos amorosos» (Tubi): Tienen su origen en una línea de osos de peluche, cada uno de los cuales tiene su propia personalidad (pero siempre cariñosos y adorables), su propio color (todos ellos en tonos dulces y suaves) y su propia tarea asignada en la comunidad en la que viven.

«Los pitufos» (HBO Max, Prime, Tubi): La más popular creación del genial Peyo son estos diminutos seres, todos de piel azul, todos prácticamente indistinguibles (excepto Papá Pitufo, con su poblada barba, o la guapísima Pitufina por obvios motivos) y caracterizados por sus rasgos de personalidad, aficiones o profesiones (Fortachón, Bromista, Gafotas, Goloso, Gruñón, Poeta, Perezoso…). Sus aventuras en el bosque, huyendo del malvado brujo Gargamel (y su gato Azrael) están trufadas de su particular lenguaje en que innumerables verbos y adjetivos se ven sustituidos por «pitufar» o «pitufado».

«Los Supersónicos» (HBO Max):  Supuso una de las miradas más optimistas al futuro para generaciones de telespectadores que soñaron con desplazarse en naves voladoras, tener robots en casa o pasar las vacaciones en el espacio. La era espacial con la llegada del hombre a la Luna prometía poner el Universo y el progreso tecnológico al alcance de las familias y «Los Supersónicos» permitían soñar con ese futuro a través de esta particular familia.

Fuente: Antonio Rentero/trecebits