La odisea de las fanáticas de la “carpa 1″ de Justin Bieber: 30 días a la intemperie y se quedaron sin verlo

El 3 de agosto consiguieron instalar la primera carpa frente al Estadio Ciudad de La Plata. Faltaron al colegio, se bañaron en casas ajenas y se turnaron para dormir. “La que menos lloró hizo un río”, dijo una de ellas.

Luego de que Justin Bieber suspendiera sus dos shows en la Argentina, la frase de una fanática describió la situación de angustia que se vivió ayer por la tarde en los alrededores del Estadio Ciudad de La Plata: “La que menos lloró hizo un río”.

Lara, una joven de San Nicolás, graficó en pocas palabras el sentimiento que abrazó a las y los jóvenes que acamparon durante varias semanas frente al mencionado estadio con un solo objetivo: estar lo más cerca posible de Justin Bieber.

Se dividieron por turnos, durmiendo en carpas, organizándose a través de planillas en donde se chequearon asistencias y guardias eternas. Lara, de 17 años, acumuló faltas en el colegio para poder cumplirlas.

El objetivo era quedar pegadas a las vallas y estar lo más cerca posible del escenario. Estábamos bien, nerviosas, pero no queríamos creer nada hasta que confirmaran la noticia de manera oficial”, expresó la joven a TN.

En un comunicado, el cantante brindó explicaciones acerca de por qué decidió suspender sus shows previstos para el 10 y 11 de septiembre: “A principios de este año, hice pública mi lucha contra el síndrome de Ramsay-Hunt, que me paralizó parcialmente la cara. Como resultado de esta enfermedad, no pude completar la etapa norteamericana del Justice World Tour”.

“Después de descansar y consultar con mis médicos, mi familia y mi equipo, me fui a Europa para intentar continuar con la gira. Realicé seis conciertos, pero me pasó factura. Este pasado fin de semana actué en Rock in Rio y di todo lo que tenía a la gente de Brasil”, agregó.

Lara relató que junto a otras 30 chicas elaboraron una planilla en Excel con el propósito de volcar allí qué labor debía cumplir cada una desde que instalaron la carpa número 1 en el ingreso al estadio.

Aquello ocurrió el 3 de agosto, día en el que establecieron que para ser parte del grupo cada una debía completar 80 horas de guardia en el lugar. Es decir, pasar al menos tres días y medio completos durmiendo en la carpa.

“Hubo chicas que hicieron más horas, teníamos un conteo. La que más había hecho iba a estar primera en la fila para cuando abrieran las puertas el 10 de septiembre”, explicó Lara.

También reveló que el plan original no era instalarse en esa fecha, sino mucho más adelante. Sin embargo, los rumores en Twitter aceleraron la cuestión y debieron accionar.

“La mayoría nos conocemos por esa red social, por interactuar en grupos de WhatsApp. Así nos fuimos conociendo. No todas son de Buenos Aires: vinieron chicas de Chaco, Córdoba, Jujuy, entre otras provincias”, indicó.

La adolescente narró que era la primera vez que hacía algo similar y que contó con el aval de su familia para realizar dicha travesía lejos de casa: “Lógicamente, me dieron permiso y me ayudaron económicamente para que pueda instalarme acá y pagarme la comida”.

En el día a día, las jóvenes cargaron sus celulares en una estación de servicio ubicada enfrente al estadio. Allí también buscaban agua para el mate y compraban comida. “Teníamos wifi, así que prácticamente estuvimos siempre ahí. En cuanto a la ducha, nos bañamos en las casas de las chicas que viven en La Plata”, sostuvo.

Lara, al igual que sus amigas, escogió no creer en el rumor de la cancelación de los shows que comenzó a circular el viernes pasado en las redes. “Ayer a la mañana apareció en todos los medios. Pensábamos que podía ser en serio, pero preferíamos esperar. Aparte yo una noche me metí al estadio y vi que el escenario seguía armado. Para nosotras seguía en pie”.

Luego de la cancelación, muchas fanáticas eligieron desarmar la carpa y transitar el duelo lejos del lugar en donde debían ver a su ídolo. Lara y sus amigas lo hicieron dentro de la carpa, llorando, abrazándose para elegir creer que nada era verdad.