El reconocimiento internacional a la gastronomía argentina volvió a quedar en evidencia con la reciente publicación de un ranking elaborado por Taste Atlas, donde la milanesa clásica y la milanesa napolitana figuran entre las 10 mejores chuletas empanizadas del mundo.
La versión tradicional ocupa el tercer puesto, mientras que la napolitana se ubica en la sexta posición, compartiendo la lista con preparaciones emblemáticas de distintos países.
Un plato que representa la identidad argentina
El informe de Taste Atlas define las chuletas empanizadas como “finas lonchas de carne, pescado o verduras rebozadas en pan rallado —y a menudo con harina y huevo batido— antes de freírlas u hornearlas”. Esta técnica culinaria es la base de platos reconocidos como el bife a la parmesana, el tonkatsu japonés o el escalope vienés, todos con gran arraigo cultural en sus regiones.
Sobre la milanesa clásica, el informe la describe como “una comida humilde pero deliciosa que consiste en una rebanada empanizada de carne de primera calidad, frita en aceite caliente”. También destaca que muchos argentinos la consideran su plato nacional no oficial, y que las versiones caseras son las más auténticas.
“Para una experiencia sencilla —señala el informe— basta con exprimirle un poco de jugo de limón, aunque suele servirse con puré de papas o papas fritas. Una de las variantes más populares es la conocida como ‘a caballo’, con un huevo frito encima”.
La historia detrás de la milanesa napolitana
Respecto a la milanesa napolitana, Taste Atlas detalla que es “un filete empanizado, frito y cubierto con jamón, salsa de tomate picante y lonchas gruesas de mozzarella que se derriten al horno”. Además, recuerda que este plato se inventó en las décadas de 1930 y 1940 en un restaurante porteño llamado Nápoli, de donde proviene su nombre.
Se trata de una de las preparaciones más queridas en el país, tanto en versiones caseras como en bodegones tradicionales. Incluso, su popularidad dio origen a una tradición de los sánguches de milanesa en distintas provincias argentinas.
El ranking mundial
El listado de Taste Atlas está encabezado por el filete a la parmesana de Brasil, seguido por el tonkatsu de Japón. Luego aparecen la milanesa argentina, el pollo Kyiv de Ucrania, el katsu karē japonés, la milanesa napolitana, los escalopes vieneses de Austria y el cordon bleu suizo, completando el top 10.
Otro reconocimiento para las empanadas argentinas
La valoración internacional hacia la cocina nacional no se limita a las milanesas. En 2025, las empanadas argentinas fueron incluidas entre las 50 mejores comidas callejeras del mundo, también según Taste Atlas, ocupando el puesto 36.
La guía gastronómica resaltó la calidad de los ingredientes, la destreza en la preparación y el profundo arraigo cultural de esta receta, que varía según las regiones del país. Existen versiones saladas —de carne, queso o verduras— y también dulces, con dulce de leche o membrillo.
“La masa, generalmente hecha con harina de trigo, se dobla sobre el relleno y se hornea o fríe hasta dorarse. Las empanadas tradicionales suelen llevar carne molida, cebolla y especias, logrando un sabor intenso y sabroso”, destaca el informe.
Identidad y tradición
Taste Atlas subraya que estas preparaciones no solo destacan por su sabor, sino por ser símbolos culturales de la Argentina. Las empanadas, incluso, fueron declaradas Patrimonio Cultural de la Alimentación y la Gastronomía por el Ministerio de Cultura, un reconocimiento que refuerza su valor histórico y social.