Israel ha iniciado una incursión terrestre en el sur del Líbano, intensificando el conflicto con el grupo chií Hezbolá. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que la operación tiene como objetivo destruir infraestructuras clave de la organización, con apoyo de la Fuerza Aérea y la artillería israelí.
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Los ataques aéreos también se han centrado en zonas como Dahiyeh, al sur de Beirut, tras advertencias a los civiles para evacuar áreas controladas por Hezbolá. Por su parte, el grupo libanés aseguró haber respondido con ataques cerca de la frontera, logrando impactos directos, según sus reportes en Telegram.
La incursión terrestre se produce después de una escalada de ataques en zonas fronterizas y tras intensas conversaciones entre Israel y EE.UU., en las que funcionarios estadounidenses aconsejaron a Tel Aviv reducir el alcance de la operación.
Hasta el momento, las autoridades libanesas informan de al menos 95 fallecidos y 172 heridos, mayormente en el sur del país, como resultado de los bombardeos israelíes en las últimas 24 horas. Tropas libanesas han retrocedido posiciones en la frontera, retirándose al menos 5 kilómetros al norte de la línea divisoria.
Curiosidad: En el pasado, Israel y Hezbolá ya se enfrentaron en un conflicto abierto en 2006, conocido como la Segunda Guerra del Líbano, donde la frontera sur del país se convirtió en un campo de batalla.