En un innovador entrecruzamiento de arte, tecnología y agricultura, un granjero tailandés ha transformado los campos de arroz de su granja, Kaew Tawan-Tanya Farm, en la provincia de Chiang Rai, en impresionantes obras de arte que representan enormes imágenes de gatitos. Esta iniciativa no solo es una expresión artística única, sino que también tiene como objetivo atraer turistas y educar sobre la fusión del arte con la tecnología.
Técnica y Tecnología en la Agricultura
Tanyapong Jaikham, el autor de estas creaciones, emplea una técnica meticulosa que combina el uso de diferentes variedades de arroz con hojas de varios colores y la precisión del GPS para plantar estas variedades en ubicaciones específicas. A medida que el arroz crece, cambia de color, creando efectos y tonalidades que dan vida al diseño final. Este proceso requiere plantar con precisión para asegurar el resultado deseado, lo que Jaikham describe como “crucial”.
Un Atractivo Turístico Innovador
Con estas obras de arte, Jaikham busca atraer no solo a los amantes de los gatos, sino también a una mayor cantidad de turistas a Chiang Rai, la provincia más septentrional de Tailandia. Para facilitar la apreciación de estas ‘pinturas’ de arroz, que se ven mejor desde cierta altura y distancia, se están construyendo torres de observación en los alrededores.
Educación y Desarrollo Simultáneo
Además de ser una atracción recreativa, Jaikham ve estas creaciones como una oportunidad educativa para los jóvenes, mostrándoles los beneficios de combinar arte y tecnología. Subraya que anteriormente el arroz se consideraba principalmente para el consumo, pero este enfoque artístico permite desarrollar el turismo y la agricultura simultáneamente.
Tailandia: Un Gigante en la Exportación de Arroz
Es importante destacar que Tailandia es el segundo mayor exportador mundial de arroz, después de la India. Esta iniciativa artística en los campos de arroz no solo pone de relieve la importancia de la agricultura en Tailandia, sino que también ofrece una nueva perspectiva sobre cómo la agricultura puede fusionarse con otras disciplinas para generar un impacto cultural y económico más amplio.