Las tenemos en los supermercados, en las farmacias y hasta en los bares. Las infusiones de plantas medicinales están por todos lados, y solemos recurrir a ellas cuando tenemos una digestión pesada, gases o alteraciones intestinales, pero hay incluso quien recurre a ellas por su supuesto poder curativo de enfermedades como la diabetes.
Si quiere saber qué dice la evidencia científica sobre estas plantas tan consumidas en infusión, le invito a seguir leyendo.
MANZANILLA
Es la reina de las infusiones digestivas, de hecho es la tisana más consumida en España y su uso como planta medicinal se remonta a la Antigua Grecia.
¿Qué dice la ciencia?
La literatura científica sobre los beneficios de la manzanilla es abundante, y aunque bastantes de esos estudios no son concluyentes sí sugieren efectos beneficiosos a nivel intestinal. Concretamente por los efectos relajantes de esta planta sobre el aparato digestivo y como reductora de la acidez estomacal.
¿Cuáles son sus propiedades reales?
Una taza de infusión de manzanilla puede ayudarnos a expulsar y reducir los gases producidos por esa digestión pesada. Si tenemos cólicos abdominales también los aliviará en parte, gracias a su efecto relajante sobre la musculatura intestinal.
Además, en caso de sufrir ardor de estómago tomar una taza también puede ayudar a reducirlo y en algunas mujeres se ha visto un mejor control del dolor menstrual gracias a esta infusión.
¿Cuáles no lo son?
A la manzanilla suele atribuírsele todo tipo de propiedades de lo más extraño: desde para curar las hemorroides hasta para solucionar la conjuntivitis o las infecciones vaginales, pasando por calmante del apetito o adelgazante.
Pero la realidad es que, a día de hoy, ningún estudio científico ha logrado demostrar que estas propiedades sean reales.
JENGIBRE
Hablamos de una raíz conocida y utilizada en la cocina desde hace miles de años, pero que también se toma en infusión como hierba medicinal.
¿Qué dice la ciencia?
Los estudios sobre esta raíz milenaria son abundantes y con resultados claros. El jengibre contiene gran cantidad de antioxidantes, compuestos antiinflamatorios, propiedades antibacterianas, vitaminas y minerales, fitosteroles… en total, más de 400 compuestos distintos.
¿Cuáles son sus propiedades reales?
Una infusión de jengibre puede ser de gran ayuda a la hora de aliviar náuseas y vómitos leves, como los que se producen tras un ciclo de quimioterapia. También ayuda a aumentar el vaciado del estómago, por lo que será muy útil en digestiones pesadas ayudando a reducir el dolor abdominal. Las propiedades antibacterianas, por su parte, nos pueden servir para reducir las bacterias de la boca que causan gingivitis o incluso algunas infecciones intestinales.
¿Cuáles no lo son?
Suele decirse que la infusión de jengibre ayuda a prevenir enfermedades como el ictus, el infarto de miocardio o incluso el cáncer. Es cierto que se han estudiado estos posibles efectos sobre el ser humano, pero esos ensayos por el momento no son concluyentes.
POLEO-MENTA
Es la número dos de las tisanas digestivas más consumidas en España, justo por detrás de la manzanilla, y los primeros registros como planta medicinal datan del siglo VIII (aunque entonces se creía que ayudaba a mejorar las erecciones).
¿Qué dice la ciencia?
A día de hoy no tenemos un número relevante de estudios científicos sólidos que confirmen sus propiedades medicinales, pero los que tenemos sugieren propiedades carminativas y antiespasmódicas.
¿Cuáles son sus propiedades reales?
Lo que nos sugieren los estudios es que su infusión podría ser útil para prevenir la formación de gases en el intestino y para facilitar su evacuación, además de para reducir levemente los cólicos intestinales.
¿Cuáles no lo son?
En algunas webs aseguran que la infusión de poleo-menta ayuda a depurar el hígado e incluso a regular los ciclos menstruales, algo que la ciencia a día de hoy está muy lejos de poder demostrar.
CÚRCUMA
Procedente de la India, la infusión de esta raíz ha desembarcado recientemente en el mercado español nada menos que con el sobrenombre del ibuprofeno natural.
¿Qué dice la ciencia?
La curcumina, el ingrediente de la cúrcuma al que se le atribuyen todas las propiedades beneficiosas y curativas, es inestable y complicada de estudiar en laboratorio. Además, cuando la consumimos en infusión, la cantidad de curcumina que absorbe y aprovecha nuestro cuerpo es tan pequeña que hace difícil poder sacar conclusiones fiables sobre sus efectos beneficiosos.
¿Cuáles son sus propiedades reales?
Por lo que se ha podido investigar a día de hoy, los beneficios que nos aportaría una infusión de cúrcuma no irían más allá de cierto efecto antioxidante. Nada que no nos aporten en mayor medida otros productos vegetales.
Se le atribuye desde poder mejorar el asma hasta curar la diabetes o el cáncer, pasando por un potente efecto antiinflamatorio y analgésico, capacidad de mejora de nuestra función articular o de freno en el avance de las enfermedades neurodegenerativas. Pero como hemos dicho, a día de hoy la ciencia está lejos de lograr demostrar que algo de esto sea real.
En 2017 se publicó una amplia revisión de todos los estudios existentes, y la conclusión fue que la amplia mayoría de las propiedades otorgadas a la infusión de cúrcuma no tenían base científica alguna