Las redes sociales, especialmente TikTok, se han convertido en el lugar favorito de muchos para compartir consejos rápidos sobre belleza, salud y bienestar. Sin embargo, no todo lo que se difunde en estas plataformas es seguro, y algunos de estos trucos virales pueden tener consecuencias peligrosas para la salud. Uno de los más recientes es una supuesta solución rápida para combatir el acné: exponerse al sol sin protección o usar camas bronceadoras. Si bien algunos usuarios afirman haber visto resultados positivos, los expertos alertan que esta práctica podría incrementar el riesgo de desarrollar cáncer de piel y, en muchos casos, empeorar el acné.
El origen del truco viral en TikTok
El consejo se ha difundido rápidamente en TikTok, con influencers y creadores de contenido sugiriendo que la exposición directa al sol sin protección solar o el uso de camas de bronceado puede “secar” los granos, reduciendo así la aparición de brotes de acné. Esta percepción surge de la idea de que la luz solar, al secar el exceso de grasa en la piel y eliminar algunas bacterias, puede mejorar temporalmente la apariencia de la piel. Sin embargo, los dermatólogos han desmentido esta creencia, advirtiendo sobre los riesgos que implica este método.
Los riesgos de la radiación UV: cáncer de piel y empeoramiento del acné
Exponer la piel a los rayos ultravioleta (UV) sin la protección adecuada es una de las principales causas del daño celular que, con el tiempo, puede derivar en cáncer de piel. Los rayos UV, provenientes tanto del sol como de dispositivos artificiales como las camas de bronceado, penetran profundamente en las capas de la piel, afectando el ADN de las células. Aunque la piel responde produciendo melanina —lo que genera el bronceado—, este mecanismo de defensa no siempre es suficiente para reparar el daño celular, lo que puede provocar mutaciones que, con el tiempo, desencadenen distintos tipos de cáncer de piel.
Los expertos señalan que una sola quemadura solar severa, con ampollas, en la infancia o adolescencia puede duplicar el riesgo de desarrollar melanoma, una de las formas más agresivas de cáncer de piel, en la vida adulta. Además, otros tipos de cáncer de piel como el carcinoma basocelular y el carcinoma espinocelular también están vinculados a la exposición prolongada y sin protección a los rayos UV.
Efectos adversos para el tratamiento del acné
Lejos de ser una solución efectiva, la exposición a la radiación UV no solo no cura el acné, sino que puede agravarlo. Un estudio de 2023 encontró que la radiación UVB, en lugar de mejorar el acné, puede activar el sistema inmunológico, lo que provoca una mayor inflamación en la piel y empeora los brotes de acné. Además, el sol estimula la producción de sebo, la grasa que obstruye los poros y es una de las principales causas del acné.
Si bien es cierto que la fototerapia es una técnica médica que se utiliza en algunos casos para tratar afecciones cutáneas como la psoriasis y el eccema, esta técnica se realiza bajo estricta supervisión médica en un entorno controlado, utilizando dosis específicas de radiación. En el caso del acné, no existe evidencia científica suficiente que respalde el uso de la radiación UV como un tratamiento eficaz. Incluso aquellos que afirman ver mejoras inmediatas tras la exposición solar, corren el riesgo de experimentar un rebote, es decir, un empeoramiento del acné una vez que la piel vuelve a su estado normal.
Los peligros de seguir consejos sin respaldo médico
Uno de los mayores problemas de estos trucos virales es que se presentan sin ningún tipo de advertencia o supervisión médica. Aunque muchos creadores de contenido no tienen la intención de causar daño, la falta de conocimiento sobre los riesgos a largo plazo puede llevar a que miles de personas pongan su salud en peligro. La desinformación puede tener consecuencias graves, y es por eso que los expertos recomiendan siempre acudir a un dermatólogo antes de probar cualquier tratamiento para el acné o cualquier otra afección de la piel.
En un estudio reciente que analizó la relación entre la exposición al sol y el acné, se concluyó que los resultados no solo no son concluyentes, sino que no se han medido adecuadamente los riesgos asociados con esta práctica. Exponer la piel a la radiación UV sin precauciones no solo pone en riesgo la salud general, sino que puede causar daños a largo plazo que incluyen envejecimiento prematuro de la piel, manchas y, en casos extremos, cáncer.