La ciudad de San Isidro fue escenario de un insólito intento de robo que recuerda al famoso “robo del siglo” de 2006. Las autoridades frustraron un posible atraco millonario a una sucursal del Banco Macro, luego de que un joven repartidor descubriera una varilla metálica que emergía entre los adoquines de la vereda, revelando la existencia de un túnel subterráneo en construcción.
El hallazgo se produjo cuando el repartidor, que se encontraba estacionado frente a un local gastronómico, notó ruidos extraños provenientes de su vehículo. Al inspeccionar la situación, se percató de la presencia de una varilla que parecía estar conectada a algo más bajo la superficie. Inmediatamente, alertó al personal de seguridad del banco, quienes dieron aviso a la policía.
Las excavaciones, que comenzaron luego de que las autoridades cortaran la varilla al ras del suelo, permitieron descubrir que el pasadizo subterráneo tenía una longitud de casi tres metros. Se presume que el objetivo de los delincuentes era alcanzar las bóvedas del Banco Macro, aunque aún faltan alrededor de 1,5 metros para llegar al túnel completo.
El operativo, liderado por la fiscal Carolina Asprella y con la presencia del intendente Ramón Lanús, continuará este jueves para determinar si el túnel estaba en pleno proceso de construcción o si ya había sido finalizado. Por el momento, no hay detenidos, aunque se espera que las cámaras de seguridad puedan arrojar pistas sobre los responsables.
Curiosidad: Este intento de robo revive el recuerdo del “robo del siglo” en el Banco Río de Acassuso, en el que los ladrones utilizaron un método similar de túnel, pero con un final diferente, logrando escapar con una suma millonaria sin herir a nadie. Sin embargo, en esta ocasión, la pronta intervención evitó que la historia se repitiera.