El equipo de científicos, liderado por el profesor de neuropsicofarmacología David Nutt en el Reino Unido, logró un hito sin precedentes en la industria al crear una bebida que utiliza el neurotransmisor cerebral GABA para producir los efectos relajantes del alcohol, pero sin las secuelas de la resaca.
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Denominado “Alcarelle”, este invento surge como respuesta al deseo constante de disfrutar de los aspectos sociales y relajantes del alcohol sin sufrir las molestias del día siguiente. La bebida estimula selectivamente el sistema GABA en el cerebro, un neurotransmisor clave en la regulación del comportamiento humano y el estado de ánimo.
El profesor Nutt explica que muchos de los efectos deseados del alcohol están mediados por el sistema GABA en el cerebro, incluyendo la reducción de la ansiedad y la relajación.
La molécula desarrollada por el equipo científico se dirige específicamente a este neurotransmisor, evitando los efectos negativos que normalmente resultan del metabolismo del alcohol en el cuerpo.
A pesar de esta emocionante innovación, la bebida debe pasar rigurosas evaluaciones de seguridad alimentaria en Estados Unidos antes de su lanzamiento comercial. Se espera que, superando esta etapa, la bebida esté disponible en mercados europeos y del Reino Unido en los próximos tres a cinco años.
La inversión necesaria para llevar a cabo esta revolucionaria creación se estima en 8 millones de libras. Aunque los posibles efectos secundarios para la salud aún no se conocen completamente, los científicos están optimistas sobre su éxito en entornos de laboratorio.
Si la aprobación final se obtiene, esta bebida podría cambiar radicalmente la forma en que se percibe y consume el alcohol, creando un nuevo estándar en la cultura del beber.