En un encuentro lleno de emociones y desafíos, el equipo de Marcelo Gallardo, Al Ittihad, se despide del Mundial de Clubes tras caer 3-1 frente a Al Ahly en el Estadio Rey Abdullah de Buraidá.
Desde el inicio, los Diablos Rojos impusieron su dominio, desafiando la presión alta propuesta por el equipo saudita. A pesar de los esfuerzos y remates a quemarropa de Romarinho, el arquero Mohamed El-Shenawy se erigió como héroe, destacándose con atajadas magistrales.
El primer gol llegó a los 18 minutos con un penal convertido por Ali Maaloul, sancionado por una polémica mano de Hassan Kadesh. La respuesta de Al Ittihad no se hizo esperar, con Karim Benzema forzando otra tapada de El-Shenawy y, más tarde, desperdiciando un penal que pudo haber cambiado el rumbo del partido.
La falta de eficacia en los últimos metros y el repliegue defensivo expusieron a Al Ittihad, permitiendo que Al Ahly ampliara la ventaja con goles de Hussein El Shahat y Emam Ashour en un lapso de tres minutos. La expulsión de Anthony Modeste dejó al campeón africano con 10 jugadores, pero Benzema logró descontar en el tiempo añadido, sellando el marcador en 3-1.
Con esta derrota, Marcelo Gallardo suma su segunda pérdida en siete partidos, poniendo fin a las esperanzas de título en el Mundial de Clubes. El equipo deberá recuperarse rápidamente, ya que enfrentará a Al Raed el sábado 23 en el torneo local.
Por otro lado, Al Ahly avanza a las semifinales, donde se enfrentará a Fluminense en busca de superar sus anteriores participaciones en el Mundial de Clubes. El camino hacia la gloria continúa para los Diablos Rojos, que sueñan con alcanzar nuevas alturas en el torneo internacional.