Cinco aprendizajes sobre la salud y la ciencia que deja la misión Polaris Dawn

La misión Polaris Dawn de SpaceX no solo rompió récords históricos de altitud y logros técnicos, sino que también está dejando valiosos avances científicos. Con un amerizaje exitoso frente a las costas de Florida, esta misión, que incluyó astronautas no gubernamentales, marcó un hito con la primera caminata espacial realizada por una tripulación privada. A su vez, abrió nuevas puertas para entender cómo el cuerpo humano enfrenta los desafíos del espacio, crucial para futuros viajes a Marte y también para mejorar la salud en la Tierra.

A continuación, te presentamos cinco aprendizajes clave en ciencia y salud que surgen de esta misión:

1- Nuevas oportunidades para estudios en microgravedad
La misión Polaris Dawn ha ampliado las posibilidades de realizar investigaciones científicas en microgravedad. Los vuelos espaciales privados permiten a más personas, fuera del ámbito gubernamental, participar en misiones, brindando una oportunidad sin precedentes para estudiar cómo la falta de gravedad afecta al cuerpo humano. Estos experimentos acelerarán los descubrimientos científicos, cruciales para la exploración interplanetaria.

2- Efectos de la microgravedad en la estructura ósea
Polaris Dawn ha profundizado en el estudio de la pérdida ósea en microgravedad, un problema importante para misiones de larga duración. Se tomaron imágenes de alta resolución de los huesos de los astronautas para estudiar cómo la microgravedad afecta la densidad ósea, incluso en misiones cortas. Estos estudios también tienen implicaciones en la Tierra, ayudando a combatir enfermedades como la osteoporosis.

3- Síndrome neuroocular asociado a vuelos espaciales (SANS)
El SANS, que afecta la visión de los astronautas debido a la acumulación de líquidos en los ojos, fue investigado con lentes de contacto inteligentes que monitorean la presión ocular en tiempo real. Los datos obtenidos podrían conducir a nuevos tratamientos para prevenir el daño visual en vuelos espaciales prolongados, esenciales para misiones a Marte.

4- Impacto de la radiación espacial en el cuerpo humano
Uno de los grandes desafíos en viajes espaciales prolongados es la radiación. La misión estudió el efecto de esta radiación en el ADN y células de los astronautas, lo que ayudará a diseñar mejores métodos de protección para futuras misiones y también tiene potenciales aplicaciones en tratamientos contra el cáncer en la Tierra.

5- El estrés en vuelos espaciales y su impacto en la salud
El estrés prolongado que enfrentan los astronautas puede afectar su salud física y mental. Polaris Dawn monitoreó los cambios fisiológicos y psicológicos de la tripulación, aportando datos clave para mitigar los efectos del estrés en misiones largas, pero también aplicables en entornos de alto riesgo aquí en la Tierra.

Elon Musk, visionario detrás de SpaceX, impulsa la meta de colonizar Marte. Esto ha colocado a la compañía como un actor clave en la exploración espacial, superando a muchos competidores tradicionales.