China abre clínicas para quienes no soportan más ir a trabajar

En un giro inesperado que expone la creciente crisis de salud mental en el mundo laboral, China inauguró clínicas en las provincias de Hebei y Sichuan para atender a personas que simplemente… no quieren ir a trabajar. Sí, leíste bien. Las clínicas se llaman literalmente: “No me gusta ir a trabajar”.

🏥 Estas instituciones están destinadas a pacientes que presentan síntomas de agotamiento extremo, ansiedad y cuadros depresivos vinculados al trabajo. Ya no se trata de “vagos”, sino de diagnósticos clínicos.

💬 “Estoy cansado de vivir para trabajar”, confiesa uno de los pacientes en una de las salas de espera. La frase, que podría sonar a excusa, ahora se considera una señal de alerta médica en un país históricamente obsesionado con la productividad.

📊 China, que durante décadas impulsó una cultura laboral de 996 (de 9 a 21 hs, seis días por semana), hoy comienza a revisar esa lógica implacable. El burnout dejó de ser un concepto teórico y se transformó en un motivo de consulta médica cotidiana.

👨‍⚕️ Las nuevas clínicas no pretenden motivar al paciente para que vuelva al cubículo cuanto antes. El foco está en su bienestar emocional, y en muchos casos, la recomendación es frenar por completo antes de que sea tarde.

🧘 ¿Y si el futuro del trabajo no solo incluyera inteligencia artificial, sino también compasión real?


🧐 Curiosidad que no muchos conocen: en la antigua China imperial, los funcionarios podían solicitar una “licencia por melancolía”, un permiso que reconocía el peso emocional de las responsabilidades públicas. Parece que el pasado tiene algo para enseñarnos al presente.