A pocos días del inicio de Wimbledon 2025, una de las historias más curiosas del circuito femenino tiene nombre propio: Carson Branstine, tenista canadiense de 24 años y actual número 197 del ranking WTA. Pero no fue su tenis lo que primero captó la atención del público, sino su faceta paralela como modelo profesional.
💼 Moda para financiar el deporte
Branstine, que logró entrar al cuadro principal del Grand Slam británico, confesó que su carrera en la moda fue clave para sostener sus entrenamientos y viajes, sobre todo durante los años más difíciles marcados por lesiones.
“No firmé con agencias por mi tenis, lo hice por mi físico”, aseguró en una entrevista con ClayTenis.
“En ambos mundos, a menudo sos visto como un objeto. La gente olvida que también sos humana”.
🏆 Una clasificación con sabor especial
La llegada de Branstine al All England Club no fue sencilla:
- En la qualy eliminó a Lois Boisson, reciente semifinalista de Roland Garros.
- También venció a su compatriota Bianca Andreescu, campeona del US Open 2019 y su excompañera en dobles junior, con quien ganó el Australian Open 2017.
Ese título juvenil fue, irónicamente, ante una joven Iga Swiatek, hoy número uno del mundo junto a Sabalenka.
🩼 Una carrera entre lesiones y reinvención
“¡La última vez que jugué una temporada completa tenía 15 años!”, reveló Branstine.
Las lesiones constantes interrumpieron su desarrollo profesional. Según cuenta, decidió dejar de seguir consejos ajenos y empezó a escuchar a su cuerpo. Gracias a un cambio en su enfoque físico, hoy se siente más fuerte que nunca:
“Soy rápida, fuerte y ágil para mi altura. Me siento una de las mejores atletas del circuito”.
📸 Más allá de la raqueta
Además del deporte, Carson se destaca como modelo, algo que no siempre fue bien recibido en el mundo del tenis. Para ella, ambas disciplinas exigen disciplina, resiliencia y presencia mental.
En su cuenta de Instagram (@carsonbranstine), alterna imágenes en torneos con producciones de moda. La dualidad entre ambas facetas alimenta una narrativa poco común en el circuito: una atleta de élite que también brilla en las pasarelas.
⚔️ Un debut desafiante en Wimbledon
En su primera aparición en el cuadro principal de Wimbledon, Branstine enfrentará a Aryna Sabalenka, actual número uno del mundo. Pero la canadiense no se intimida:
“Tengo confianza en mí misma. Creo que puedo enfrentarme a cualquier jugadora”.
🎯 El tenis como prioridad
Aunque muchos la asocian al modelaje, Carson Branstine no tiene dudas sobre su meta: demostrar que puede competir al más alto nivel. Más allá del resultado, su presencia en la catedral del tenis ya es una victoria personal.
Su historia combina superación, belleza y perseverancia. Lo que ocurra en Wimbledon será solo el próximo capítulo de una carrera que desafía etiquetas y amplía los límites del deporte profesional.