“Joyspan”: el nuevo enfoque de la ciencia que propone vivir más, pero también mejor

Durante años, la medicina y la ciencia centraron sus esfuerzos en extender la vida humana. Sin embargo, una nueva corriente plantea que la longevidad no tiene sentido si no se acompaña de bienestar y propósito. El concepto “joyspan”, creado por la geriatra Kerry Burnight, redefine la forma de pensar el envejecimiento.


Vivir más o vivir mejor

La geriatra estadounidense Kerry Burnight propuso el término joyspan para sumar una nueva dimensión a la idea de longevidad. Según explicó en un artículo publicado por TIME, este enfoque plantea que la satisfacción y el bienestar son tan esenciales como los años o la salud.

“Si canalizamos todo ese dinero, tiempo y energía en la búsqueda de la longevidad, solo para llegar a esos años adicionales y darnos cuenta de que en realidad no los estamos disfrutando, ¿cuál es el sentido?”, reflexionó Burnight.


El sentido de una vida larga

Burnight desarrolló su teoría a partir de miles de casos clínicos y décadas de observación. Explicó que “joyspan” complementa los otros dos pilares del envejecimiento saludable:

  • Lifespan: la cantidad de años que se vive.
  • Healthspan: los años vividos con buena salud.
  • Joyspan: la capacidad de experimentar satisfacción y propósito durante ese tiempo.

La médica contó que llegó a este concepto después de ver sufrimiento en muchos de sus pacientes mayores: “Durante los primeros veinte años de mi carrera, veía personas solas, desplomadas en sillas de ruedas, que decían: ‘Ya no tengo propósito’. Eso me llevó a cuestionar el enfoque exclusivo en la cantidad de años”.


Un modelo basado en la calidad de vida

“Joyspan se centra en la calidad de tu larga vida, y no es solo genética. Son esos pequeños hábitos y perspectivas diarias que adoptamos”, señaló Burnight, quien publicó sus hallazgos en el libro Joyspan: The Art and Science of Thriving in Life’s Second Half (2025).

Según sus investigaciones, las personas que alcanzan mayor bienestar en la vejez comparten cuatro hábitos fundamentales: crecer, conectar, adaptar y dar.


Cuatro hábitos para una vida larga y feliz

1. Crecer: mantener la curiosidad

Burnight destacó la importancia del aprendizaje continuo: “Esperar crecer, proponerse cosas difíciles y divertidas es lo que diferencia a una persona mayor activa de otra que dice: ‘Ya no puedo hacer nada’”.
El crecimiento, afirmó, empieza con la curiosidad y con el hábito de intentar cosas nuevas, desde aprender una habilidad hasta entender temas complejos.


2. Conectar: fortalecer los vínculos

La calidad de las relaciones personales es central en el modelo joyspan. Burnight recomienda invertir tiempo en nuevas y viejas amistades, ser quien llama, quien acompaña, quien recuerda fechas importantes.
“Cuando alguien me dice que está solo, le pregunto: ‘¿A quién invitaste? ¿A quién escribiste hoy?’”, explicó.


3. Adaptar: responder ante los desafíos

El envejecimiento implica cambios inevitables. Para Burnight, la clave está en la capacidad de adaptarse: “Vas a tener que lidiar con cosas difíciles, pero siempre podés elegir cómo enfrentarlas”.
La especialista sugiere recursos como la meditación, la escritura o la gratitud diaria: “Despertarse y agradecer el café, la almohada, el gato. Son pequeñas cosas que cambian la mirada”.


4. Dar: el poder de la generosidad

El último pilar del modelo es la generosidad cotidiana. Burnight propone establecer una meta diaria de dar: un gesto amable, un favor, una escucha atenta.
Relató el caso de una paciente centenaria que, pese a sus limitaciones, es “la mejor oyente del mundo” y se ganó el cariño de todos a su alrededor.


Un cambio posible a cualquier edad

Burnight también compartió el ejemplo de su madre, quien adoptó estas prácticas a los 70 años y transformó por completo su vida: “Hoy tiene 96, vive sola y es la mejor versión de sí misma”.

A pesar de los problemas de salud y las pérdidas, su madre se convirtió en una persona radiante y con propósito. “No es única —dice Burnight—. Hay millones de personas que lo están logrando. Es posible para todos nosotros.”