🎭 Lo que parecía una historia marginal en redes chinas terminó explotando como una bomba de tiempo en toda Asia y Occidente. Jiao Moumou, un hombre de 38 años que se hacía pasar por una mujer llamada “Sister Hong”, fue arrestado por la policía de Nanjing luego de que se descubriera que había tenido relaciones sexuales con cientos de hombres —muchos estiman que más de 1600— a quienes engañó, grabó sin consentimiento y expuso públicamente en plataformas como Douyin (la versión china de TikTok).
📲 Los videos, que se publicaban en grupos privados pagos, comenzaron a filtrarse y viralizarse en redes como Weibo, generando un efecto dominó demoledor: miles de personas comenzaron a reconocer a sus parejas, maridos o amigos en los videos íntimos con “Sister Hong”. El dato que más conmocionó: muchas de las víctimas no sabían que estaban teniendo relaciones con un hombre travestido, y cuando se enteraron, ya era tarde.

💔 Las consecuencias no tardaron en llegar. Se multiplicaron los divorcios, rupturas sentimentales, y hasta familias destruidas por la vergüenza y el escándalo. En TikTok y otras redes sociales, aparecieron víctimas llorando frente a cámara, relatando entre lágrimas cómo fueron engañados, cómo vieron su intimidad expuesta sin permiso y cómo sus vidas personales se derrumbaron en cuestión de horas.
😔 “No puedo más con esto. Mi mujer me dejó, mis amigos me dieron la espalda, y no sabía que era un hombre. No lo sabía, lo juro”, dice uno de los tantos videos publicados por víctimas anonimizadas, buscando algo de contención en medio del caos.
🚨 Todo salió a la luz gracias al valor de una sola persona. Uno de los hombres grabados decidió romper el silencio, hacer la denuncia y enfrentar el estigma. Su caso activó una investigación policial que destapó una red escalofriante de manipulación y abuso. Según medios chinos, en el allanamiento al departamento de Jiao se encontraron al menos 320 grabaciones de encuentros sexuales, aunque se estima que hay muchas más.

🧟♂️ Lo más curioso —y desconcertante— del caso es que pocas personas, durante los encuentros, se dieron cuenta de que Sister Hong no era una mujer. Jiao utilizaba maquillaje pesado, filtros digitales, peluca larga y un cambio de voz logrado con tecnología. En uno de los videos filtrados, se puede ver cómo un joven comienza a sospechar al notar “algo raro” al tocarla:
🗣️ “Pará, ¿qué sos vos?”, se lo escucha murmurar, antes de apartarse bruscamente.
😰 Muchas víctimas no se animaron a denunciar por miedo al rechazo social, a ser “descubiertos” como parte de una relación con una persona trans o travesti. El miedo al escrache, al juicio de su entorno o al ridículo los dejó en silencio… hasta que uno rompió el muro del miedo y abrió la puerta a una avalancha de testimonios.
📜 La policía informó que Jiao será juzgado por distribución de material obsceno, violación de la privacidad y, si se confirma que es portador de HIV y actuó con intención de contagiar, podría enfrentar cadena perpetua o pena de muerte.
📌 Curiosidad final: En varios foros chinos donde se discute el caso, algunos usuarios debaten cómo fue posible que tantos hombres no detectaran que Sister Hong era un hombre. ¿La tecnología de filtros es tan avanzada o la soledad digital hace que la gente vea lo que quiere ver? Lo cierto es que la estética andrógina en las redes asiáticas hace cada vez más difícil distinguir el género sin contacto físico real.
Preguntar a ChatGPT