Paredes volvió a La Bombonera: entre la ovación del pueblo xeneize y la silbatina al presente de Boca

🎉 El regreso de Leandro Paredes a Boca Juniors prometía ser una fiesta, pero la realidad futbolística le puso freno al entusiasmo en la Bombonera. El empate 1-1 frente a Unión de Santa Fe dejó sensaciones encontradas en el hincha: emoción por ver al campeón del mundo con la azul y oro, pero bronca por el rendimiento colectivo que ya acumula nueve partidos sin triunfos.

El volante surgido en el club ingresó en el segundo tiempo, fue ovacionado y hasta aportó una asistencia de lujo para el empate de Di Lollo, pero no alcanzó para cambiar el resultado ni el humor general de la gente.

🧵 Desde temprano, el clima era especial. Los pasacalles colgados en la zona de Brandsen y Del Valle Iberlucea daban cuenta de la expectativa. La decisión de Miguel Ángel Russo de incluirlo en el banco generó murmullos, pero el DT eligió llevarlo de a poco: “Va a ir sumando minutos”, diría luego en conferencia.

📣 Cuando su nombre fue anunciado por los altavoces del estadio, la ovación fue inmediata, al igual que la de Miguel Merentiel. El único jugador resistido por los hinchas desde el arranque fue Carlos Palacios, que recibió silbidos aislados incluso antes de tocar la pelota.


📉 El primer tiempo fue un bostezo futbolístico. Boca casi no inquietó al arquero Tagliamonte y apenas mostró algo en un remate de Velasco que rozó la red lateral. Unión, por su parte, avisó con un cabezazo de Fascendini y un par de contras mal resueltas. Ni Marchesín ni su colega tuvieron trabajo serio.

⏱️ La segunda mitad tuvo algo más de emoción, pero sobre todo por lo que pasaba fuera de lo estrictamente futbolístico. La gente se agitó al ver a Paredes entrar en calor y estalló cuando ingresó al campo a los 19 del complemento. Casi al mismo tiempo, Tarragona puso el 1-0 para la visita y silenció a la Bombonera.

🔁 Salió Palacios y recibió una sonora silbatina. Entró Cavani, y la ilusión creció de nuevo. Y a los 40’, cuando todo parecía cuesta arriba, apareció la zurda de Paredes: tiro de esquina con chanfle desde la derecha y cabezazo de Di Lollo para estampar el 1-1.

🎯 Fue la jugada más celebrada del partido. El resto: barullos, laterales festejados, algún centro que no fue gol por centímetros, y silbidos al final. “Movete, Xeneize, movete” fue el canto que marcó el humor de la tarde.


📸 Al cierre, los jugadores saludaron a las apuradas. Pero Paredes se quedó unos minutos más. Se sacó selfies con los alcanzapelotas, firmó camisetas y volvió a meterse en el túnel, aplaudido por todo un estadio que, aunque enojado con el presente, aún se ilusiona con la jerarquía de sus ídolos.