Dos años después de un crimen que sacudió a la comunidad de Sorocaba, Brasil, las autoridades han detenido a los presuntos responsables: la exesposa de la víctima y tres hombres que habrían llevado a cabo el asesinato. El motivo del crimen parece ser un acto de venganza personal.
La investigación reveló que, en diciembre de 2022, la mujer pagó 2.900 reales a un vecino para que “asustara” a su exmarido. Sin embargo, lo que comenzó como una amenaza rápidamente se convirtió en un acto de extrema violencia. El vecino contrató a otros dos hombres y, con el pretexto de ofrecerle un trabajo, llevaron a la víctima a una propiedad rural.
Una vez allí, el hombre fue brutalmente golpeado durante dos días. Incapaz de defenderse, los agresores lo arrojaron vivo a un tanque lleno de pirañas, donde su cuerpo fue devorado.
Golpes, amenazas y un final macabro
El informe forense confirmó que la víctima murió a causa de los golpes, y que fue arrojada al tanque con pirañas para ocultar toda evidencia del crimen.
El trasfondo del caso señala que la exesposa había presentado cinco denuncias por violencia de género contra la víctima, siendo la última solo dos meses antes del asesinato, lo que sugiere un aumento en la tensión entre ellos.
Después de dos años de investigación, la policía arrestó a la mujer y a dos de los cómplices hace un mes. El tercer implicado fue capturado recientemente gracias a mensajes de WhatsApp, rastros telefónicos y la entrega de un automóvil como parte del pago por el crimen. Las pruebas obtenidas han dejado pocas dudas sobre la participación de los sospechosos.
Según Jornal Cruzeiro, los cuatro enfrentan cargos por homicidio calificado, un delito que en Brasil puede conllevar penas de prisión severas.