Argentina pierde juicio millonario en tribunal internacional por nacionalización de AFJ

La Argentina enfrenta las consecuencias de una decisión pasada con la reciente pérdida de un juicio millonario en un tribunal internacional. El litigio surgió a raíz de la nacionalización de los fondos de jubilaciones durante la presidencia de Cristina Kirchner, y fue llevado adelante por la compañía Metlife, una de las administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones (AFJP).

El caso fue debatido por el tribunal arbitral del Banco Mundial, donde Metlife presentó una demanda basada en la violación del tratado de protección de la inversión de los Estados Unidos con Argentina. El fallo, emitido esta semana, otorgó un resarcimiento mucho menor al reclamado por la compañía, debido a la dificultad de probar los daños específicos causados por la decisión de nacionalización.

La demanda, presentada en 2017, se fundamentó en la expropiación de las AFJP durante un período en el que el país experimentaba un declive en el superávit fiscal. A pesar de que el kirchnerismo había consultado previamente a la sociedad sobre la posibilidad de estatizar el sistema jubilatorio y recibido un claro rechazo, finalmente optó por la nacionalización para enfrentar el creciente déficit fiscal.

El tribunal, compuesto por árbitros internacionales, confirmó la jurisdicción del caso, determinó que Argentina había violado el tratado de inversión y decidió que el Estado debía compensar a Metlife por el valor justo de mercado del negocio expropiado. Aunque la demanda originalmente buscaba cientos de millones de dólares, el resarcimiento final concedido fue de aproximadamente 6,8 millones de USD en daños y perjuicios, más 1,5 millones de USD en intereses previos al laudo.

Este caso se suma a una larga lista de litigios en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI), donde Argentina ha sido el país más demandado. La decisión del tribunal internacional refleja las repercusiones continuas de las políticas pasadas en la economía y las finanzas del país, evidenciando que la herencia de decisiones pasadas sigue siendo una carga para el presente.