En una jornada marcada por la celebración de la cultura y la música, Argentina conmemora el Día Nacional del Tango el 11 de diciembre. Esta fecha, cargada de significado, coincide con el nacimiento de dos titanes de este género musical que dejaron una huella imborrable en la historia del tango: Carlos Gardel y Julio De Caro.
Carlos Gardel, el icónico cantor nacional, músico y compositor, vio la luz un 11 de diciembre de 1890. Su estilo único de interpretar el tango lo catapultó al reconocimiento mundial, creando lo que conocemos como el tango canción. A la par, Julio De Caro, violinista, compositor y director, también nació en este día, pero en 1899. Su contribución fue fundamental al introducir la vertiente evolucionista en la música del tango.
La elección de esta fecha como el Día Nacional del Tango no es casualidad, sino un tributo a estos dos grandes maestros que compartieron su talento con el mundo. La iniciativa de establecer un día dedicado al tango fue propuesta por el compositor y productor artístico Ben Molar. Sin embargo, desde la propuesta inicial hasta su aprobación oficial, pasaron doce años hasta que el 29 de noviembre de 1977, mediante decreto municipal y luego por decreto nacional el 19 de diciembre de ese mismo año, se estableció el Día Nacional del Tango.
Orígenes y Diversidad del Tango: Una Ventana a la Historia Argentina
El tango, un género complejo que abarca danza, música, canción y narrativa, tiene sus raíces en una fusión de elementos culturales de origen africano, americano y europeo. A lo largo del siglo XIX, el tango actuó como un catalizador de la integración en el área del Río de la Plata, involucrando a gauchos, criollos, inmigrantes europeos y afroargentinos en su formación.
El término “tango” tiene sus raíces en África, específicamente en la lengua bantú, siendo llevado a América por los esclavos. Este género incorpora el candombe negro, la habanera cubana, la milonga, la música popular española, el violín gitano, los violines judíos, el klezmer, la nostalgia italiana, el bandoneón alemán, la influencia parisina, el jazz y la música clásica contemporánea.
El tango, más que un género musical, es un proceso cultural complejo que refleja la diversidad de la pampa, la ciudad y el puerto. Desde sus orígenes, el tango ha sido una ventana que nos permite explorar la rica historia sociocultural de Argentina.
En el habla cotidiana, la publicidad y los medios de comunicación, las referencias al tango son constantes. Este género musical ha sido una institución informal que facilitó la integración de los inmigrantes a la vida del joven país. Incluso en la literatura, escritores argentinos como Borges, Cortázar y Bioy Casares han incorporado el tango como parte fundamental de su obra.
En este Día Nacional del Tango, los argentinos celebran no solo un género musical, sino también un elemento central de su identidad cultural. A través de las notas y pasos de esta danza apasionada, el país sigue escribiendo su historia en las líneas del tango.
Curiosidad relacionada: Durante el siglo XIX, el tango actuó como un catalizador de la integración en el área del Río de la Plata, involucrando a gauchos, criollos, inmigrantes europeos y afroargentinos en su formación. Este fenómeno artístico sigue siendo una fuente de cohesión cultural para los argentinos en la actualidad.